domingo, 28 de marzo de 2010

Sede, materia, horario, aula

El viernes fue uno de los días más bizarros de mi historia, me paso de todo... desde bajonearme por pensar que me perdía todos mis planes hasta llegar a lo de mi hermano a dormir pasaron unas cuantas horas, en las que retomé relación con un amigo cíclico, me encontré con un ex que me pidió encarecidamente que reconsidere la relación, conocí una escritora tremenda cuyos escritos muestran solo un pedacito de su marote y conocí un muchacho del interior que me dio charla en el colectivo... (eso nunca pasa, fue genial)
El sábado fue un poco más calmo, me levanté con mi hermano y arrancamos para el campo de vuelta, salí un rato (hasta la estación de servicio) pero no llegué a ningún boliche porque estaba (mmm, ¿cómo se decía?) super ortiva y no tenía ganas de salir, sobre todo de pasar a quinto plano por tener rutinas diferentes... así que me quedé con mis hermanos seleccionando fotos del casamiento del menor.
Hoy es domingo, casi lunes... último día de vacaciones, mañana empieza mi vida universitaria y arranco el día yéndome a capital con mi vecina a mostrarle una casa de botas (y a mi fonoaudióloga) para después, a eso de las 6 y media, entrar en ese edificio que de día funciona como escuela y tratar de encontrar un asiento en ese salón desconocido, lleno de desconocidos (la idea me emociona).

Por lo pronto, me parece que la persona protagonista del comentario lee esto, pero (...): Ya conté que empecé a hablar con ese vecino al que nunca le había prestado atención (cosa mutua) y cuya imagen de él era de un flaco totalmente creído y poco agraciado. Como verán y como dije, me equivoqué y hasta me acostumbré a charlar con él, así que MSN, abrite!


Bueno, me dejo de tanta cháchara: vida facultativa, allá vamos!

1 comentario:

  1. Suerte en ese comienzo, Bar!! Andamos todos iguales de nervios y ansiedades

    ResponderEliminar

¡Todo comentario es bienvenido!

Archivo del blog