Confesiones barbaritas

Hoy fue un buen día, dormí mal pero mejoró todo, copadísima la clase de norteamericana (aunque ya tengo diferencias con el profesor que prontamente me encargaré de comunicarle) y taller. Taller... mmm taller, obviamente me encontré antes con H, mi pseudoprofe (amigo, mentor, padrino?) y nos tomamos él su café de siempre y yo mi jugo de cumpleaños mientras charlábamos sobre mi facultad, sobre los desamores, sobre los amores, sobre la tecnología, etc.

La jornada propiamente dicha de taller estuvo muy copada, el denzel que me persigue por facebook y msn no fue y en breve se va de viaje así que por largo tiempo no lo voy a ver, me llevé bien con la erudita que siempre me hace pensar que se poco, me tiraron unas puntas para el tp que tengo que hacer... Todo bien, incluso pienso que es bueno haber caminado seis cuadras para llegar al subte y encontrarlo cerrado, al parecer hoy cerró media hora antes... me tomé un colectivo y, como tengo las uñas rojas, un flaco empezó a mirarme, se bajó un par de paradas después de mi subida y terminamos a las sonrisas, a los saludos... tendría que haberle dicho que por actuar de esa forma y ser lindo ahora es mi novio, se complica un poco porque no tengo el teléfono, pero qué cómico, se dio todo demasiado gracioso... esperaba un bondi, pasa otro y me doy cuenta de que ese también me lleva, cuando lo voy a parar ya pasó, sigo esperando... pasa otro que ni siquiera era el que estaba esperando primero y ¡zas! me pasó eso. Claro que a los cinco segundos ya me había armado la historia entera de su vida y de mi vida y de por qué nos pasó eso y de por qué me pasan esas cosas... ya encajé su cara (que mal-recuerdo) en un arquetipo y le puse el rostro puntual de otro de la facu (es que se parecen, pero mi amor de coelctivo es más lindo) y me sorprendí de cómo la mente va a mil, en dos paradas me pasó eso, pensé mil cosas, en otras tres que pasamos hasta llegar a la mía me imaginé su cara y posibles encuentros, me imaginé que todo pasa por algo y entendí que algún día alguien me va a decir que me conoce porque le devolví una sonrisa desde arriba del 132... qué locura, claro que llegué a mi casa super risueña, con una sonrisa de oreja a oreja, no por el hecho de haber tenido una sonrisa por retribuir sino porque hoy fui diferente, me animé, me pinté las uñas de rojo y ahora tengo una excusa para mi cambio de actitud... pero en definitiva es eso, tengo un cambio de actitud, un jean muy cómodo y ancho, una remera muy cómoda y que inventa atributos y unas uñas rojas me levantaron...

Todo el tema del atuendo, sumado a que seguí las clases, a que estoy aclarando mis ideas y a que estoy intentando que esa persona a la que quiero se baje de esa nube y empiece a darme asco, que si bien no lo logro, en el camino al menos empiezo a lamentar el hecho de estar sola más que el hecho de no estar con él... (retomo, todo eso) me tiene de buen humor.

Y ahora señores, a prepararme un tico arroz con atún :) y a esperar a mi amiguchi con un plato caliente, porque si hay algo que soy, es parecida a una madre.