miércoles, 14 de diciembre de 2011

Chan

Bueno, arranco una vez más con "bueno" porque es la forma más fácil de redactar un chisme, o algo bizarro. Todos los que me conocen saben que me pasan cosas graciosas o raras y saben que gran parte de mi mente está ocupada en la percepción social, es decir: cómo me ven los demás y cómo los veo, no tanto físicamente sino en lo que refiere a las reacciones que puedo provocar o sentir.
Mi vida a veces es una películas, desde amores por un colectivo hasta miradas matadoras, pero la última me acaba de dejar perpleja: hago las compras en un supermercado que queda a tres cuadras de mi casa y siempre que voy el encargado (que a veces hace de cajero pero sin el uniforme para que veamos que tiene el poder) me mira, me sonríe y me dice alguna boludez. Una vez pagué con tarjeta de crédito, hace meses, y desde ahí que me saluda "hola Barbarita, chau Barbarita, cómo andás hoy Barbarita?".
El quid de la cuestión es que la semana pasada me dijo que quiere invitarme a tomar un helado, un poco vintage, como si yo tuviera 15 y él 14, pero me gustó. Me interesó la propuesta porque el último tiempo más que birra y noches no me ofrecen y había empezado a pensar que la seducción iba a correr por mi cuenta de por vida. Hoy volví al super, fui a comprar unos ravioles porque tengo un invitado a cenar y voy a hacer algo fácil y rico (ravioles con alta salsa) y cuando entré ví que estaba. Pf, pasé haciéndome la diosa con el pelo inflado porque afuera llovía y así todo el señorito se me acercó a pedirme el teléfono.
Hace como media hora que estamos meta mensajito y me acaba de decir que tiene 31, un hijo de 3 años y que vive en pareja, pero que no me asuste.
What the fuck? jajajaja seguiré creyendo que alguien en algún momento me va a tomar en serio o me resigno? que no me asuste, no, no me asusto, pero simplemente justifico mi vulnerabilidad con estas cosas. No sé si quiero tomar ese helado de dulce de leche con dulce de leche y chocolate con chocolate. Pero quiero, porque sigue sorprendiéndome que alguien se interese en mí y siento que no estoy en condiciones de hacerme la linda. Pero después de un rato me doy cuenta...estoy diciendo puras estupideces, es como salir con un hombre casado.

"Vivís sola? entonces un día me podrías invitar a tu depto".
Voy a decir algo y que quede claro: no es un bulo. Jajaja, no es un bulo y mi cuerpo tampoco. Mierda, mi cuerpo tampoco.
¿Cuándo me volví tan vulnerable? con A, con M? no sé, quiero un alguien con todas las letras, de la "a" a la "n".
Quiero que si para vos soy un 10 no me trates como a un 3.

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